
La preocupación por el medio ambiente y la sostenibilidad es el motivador de muchos proyectos y cambios en la sociedad. Se han creado algunos medios alternativos para garantizar que el planeta sea tratado de la mejor manera posible, sin tener que cambiar drásticamente nuestra forma de vida. Desde pajitas de papel hasta coches eléctricos, se ha hecho mucho para mejorar nuestra relación con el planeta.
Los coches eléctricos, una tendencia de movilidad mundial, se están volviendo más populares a medida que las tecnologías se vuelven más accesibles. Según un estudio de FGV Energia/Accenture, en 2030 el número de coches eléctricos en el mundo debería alcanzar los 140 millones. Si hace apenas unos años un vehículo eléctrico era cosa de ciencia ficción, hoy es una realidad para muchos. En Brasil, las ventas de automóviles eléctricos e híbridos superaron la marca de 30 mil unidades de enero a noviembre de 2021, según datos del Registro Nacional de Vehículos Automotores (Renavam), del Ministerio de Infraestructura.
Pero, ¿cómo funciona la carga de un coche eléctrico? Actualmente existen varios cargadores adaptados a las necesidades de los usuarios, entre ellos el cargador portátil, que garantiza un mayor control y autonomía de la propia batería, al no ser necesario cambiar de ruta para encontrar un punto de carga. Muchos modelos, como el de Steck, permiten su uso en cualquier garaje, gasolinera o centro comercial equipado con una salida industrial.
Otro beneficio para los usuarios de cargadores de coche Steck es la carga más rápida. Está equipado con tres selectores, que permiten al usuario decidir cuál es la potencia (carga más rápida o más lenta), y si existe un horario de recarga.
La función plug & play está aquí para aportar practicidad a la vida cotidiana. Lo único que necesitas es una entrada industrial de 32 A para cargar, y un enchufe tipo 2, estándar europeo y compatible con la mayoría de coches eléctricos.
Y, por supuesto, no puede faltar la seguridad. Para lograrlo, el cargador está equipado con una pantalla Oled que protege contra variaciones de corriente y voltaje, cortocircuitos, lluvia y polvo (RCD tipo A – protección AC – protección IP65).
Paso a paso de cómo utilizar
El cargador de coche portátil Steck es capaz de cargar su vehículo en cualquier momento y lugar. Su conector universal lo hace compatible con todos los vehículos eléctricos con enchufe tipo 2. Su potencia de carga varía entre 1 kW y 7,7 kW y se utiliza en seis pasos:
- Primero, conecte el enchufe Steck al tomacorriente.
- Luego, presione el botón «Amps» para cambiar la corriente de carga.
- Pulsa el botón “Timer” para programar el inicio de la carga (con un máximo de nueve horas de retraso).
- Confirme los parámetros configurados en la pantalla.
- Conecte el enchufe tipo 2 al conector del coche.
- El LED encendido indica que el cargador está funcionando.
¿Y cuáles son las funciones disponibles?
El cargador portátil universal de Steck ofrece:
- Protección contra fugas de corriente residual: tipo A RCD (Protección AC).
- Protección contra la sobretensión.
- Proteccion al sobrevoltaje.
- Protección IP44 contra chorros de agua proyectados.
- Cambiando la corriente de carga con el botón «Amps».
- Configurar el tiempo para comenzar a cargar usando el botón “Temporizador”.
- Memoria de configuraciones anteriores.
- Garantía Steck de un año.